SI TOCAN A UNA, NOS TOCAN A TODAS
Es de una importancia crucial conseguir que esta ley (de identidad de género) no salga adelante porque están en juego nuestros derechos, los derechos de todas las mujeres. El sexo con el que naces sí importa en un mundo donde aún te siguen matando por nacer con vagina, donde las cifras de mujeres violadas o asesinadas por hombres siguen siendo un escándalo o donde la mutilación genital femenina sigue siendo una realidad en algunos países. Las mujeres necesitamos la carga política de nuestra biología para seguir elaborando nuestro proyecto emancipatorio. Si no podemos definir lo que es ser mujer, no tenemos nada, se desarticula y despolitiza toda la lucha.